¿Y la evolución?

Por Aníbal Terán

No es la primera temporada, pero no debería ser solo una más.

Una medida vaya uno a saber fundada en que hace desde hay años que cuando se disputan clásicos del fútbol femenino solo puedan acceder como espectadores un número limitado de personas.

Normalmente se le permite a cada jugadora invitar cierta cantidad de personas (normalmente tres); es decir, en algunos casos no puede ir ni la totalidad de la familia.

En una semana se juegan los clásicos y todo hace indicar que en el de primera división se definiría el título del Campeonato Apertura.

Si el solo hecho de jugar Peñarol y Nacional ya es atractivo, imaginemos si hay puntos fundamentales y título en juego.

El año anterior, se había especulado con crear una tarjeta de acceso al fútbol femenino; recordemos que no se cobra entrada para los partidos de ninguna categoría ni divisional; salvo en alguna final.

Primer gran error desde nuestro punto de vista.

Una entrada simbólica, por poner una cifra de solo veinte pesos; ya te filtra un montón de bobos que no van a gastar veinte pesos que les sirve para el vino.

Este evento de listas de invitados se ha dado también en finales.

Esta semana será decisiva en la previa, ya que las jugadoras organizadas en AFU, ya han emitido un comunicado rechazando las restricciones en los clásicos.

Una jugadora se expresó en redes sociales sobre el tema, y la O.F.U., Organización de Futbolistas Uruguayas ha compartido esa carta.

Parece que organizamos un mundial obteniendo una excelente nota a nivel internacional, pero seguimos esquivando tomar decisiones importantes para potenciar el fútbol femenino.

Se necesitan acciones y no discursos bonitos.

Alguien tiene que levantar la voz, las chicas no tienen la culpa de los recursos mal distribuidos en el fútbol uruguayo.

Si los mediocres creen que hay que llenar medio estadio de seguridad o policía; pues que lo llenen y permitan que miles disfruten de un bonito espectáculo.

Pero lo que es más importante, permitan que las chicas jueguen con buenos marcos de público, que aprendan a soportar hinchadas cantando y tocando tambores; después es fácil exigir a una selección o a un club cuando compite fuera de casa sin tener en cuenta que no hay ciertas exigencias en lo doméstico.

Esperemos exista una resolución que permita solucionar lo que no han querido.

Hace minutos O.F.U., emitió el comunicado que compartimos con los lectores.