Y un domingo que no fue cualquiera,  el “Cairo Cosio” reabrió sus puertas

Atenas, el 1er Campeón derrotando a Paysandú Wanderers en el Cairo Cosio. Foto archivo de Nestor Francia

Por Julio Damico de Semanario 20 Once

EL 20 DE JUNIO DE 1965 ATENAS LEVANTABA SU PRIMERA COPA

En los primeros años de la década del 30,  Wanderers adquirió un amplísimo predio  perteneciente a la familia Horta Beraldo. Delimitaba al norte por Camino de las Tropas (San Martín), al oeste por un “cortada” que hoy la ubicaríamos entre Pereda e Independencia, al sur por calle A” (Benito Chain) y al este  por Montevideo donde sería la entrada principal.

Allí iba a construir su parque Deportivo. Así se llamaba en principio hasta que fue  designado “Rodolfo Cairo Cosio” en homenaje, en vida, a uno de los fundadores y dirigentes más activos en aquellos primeros años.

El 27 de enero del `30 Wanderers entrega mil pesos quedando a pagar 288, 50 (doscientos ochenta y ocho con cincuenta) por dicho terreno.

Foto de Sergio Feris

En su momento se reunió a convecinos del lugar a fin de unirse para solicitar la conexión de agua corriente.

Fue inaugurado el 4 de agosto  de 1940. Pasó a ser el primer escenario, de los llamados cerrados,  de un club de Paysandú. Y compartió por muchos años con el Parque Artigas toda la actividad del fútbol sanducero.

Tal vez por la cercanía del arroyo Sacra, su piso se convirtió en el mejor de todos.

Según datos de la institución hace nueve años que estaba “parado”. La falta del dinero necesario para el mantenimiento (era algo así como cuatro manzanas) hizo que el deterioro fuera en aumento. El cerrado exterior de tantos y tantos metros a base de alambrado era fácil presa de los depredadores disfrazados de hinchas que partido a partido lo destrozaban.

Se robaron todo de las cabinas para la prensa construidas del lado oeste. Debieron desarmar las tribunas sobre ese mismo sector porque se la estaban llevando día a día.

Por algo esa zona fue considerada “conflictiva”.

Este domingo 25 de junio reabrió sus puertas. Está mucho mejor, obvio, que cuando cerró pero también falta aún para convertirse en un escenario de calidad para el fútbol sanducero.

Es un hecho a destacar que vuelva a la vida futbolística local un histórico escenario. Allí se jugó la primera final de la Copa de Clubes campeones de OFI entre Wanderers y Atenas de San Carlos; se corrió un campeonato del Litoral de ciclismo (en tiempos de Rubén “Vasco” Etchebarne) con un velódromo construido a su alrededor (por eso los peraltes detrás de los arcos)

Es el deseo que los dirigentes tengan la fuerza, y el dinero, para seguir mejorándolo